Por alguna razón, esta mañana dos palabras francesas me golpeaban suavecito para anunciarme su presencia...
Tal vez, la particularidad de este día de sol apenas perceptible,propio del invierno.
"Bonjour Tristesse"...Más extraño aún es que evoco a una película que no vi, pues tenía sólo ocho o nueve años cuando la pasaron en el viejo cine Ocean de mi pueblo cordobés. Década del cincuenta, cuando las películas eran cuidadosamente calificadas para proteger a la infancia..."Prohibido para menores de 18 años" y quién quisiera ingresar a la sala debía exhibir su Documento (Libreta de enrolamiento o libreta cívica) que acreditaba su mayoría de edad.
Comencé a buscar informaión sobre el tema. Emcontré en Buenos días tristeza: el culto al placer una nota analítica sobre el contenido de la novela y la película, firmada por Carlos Giménez Soria.
Lo que leí me informó pero no respondió a mi pregunta:¿por qué tengo esta frase martillando en mi cabeza? "Bonjour tristesse"...
4 comentarios:
Nunca ví la película, pero el libro lo leí hace mucho tiempo. Recuerdo que me dejo un poso extraño, no sabría ahora definirlo.
Si te martillea, será por algo que tal vez descubras pronto...
Un beso, Diana
Muchas palabras vienen a nosotros como los sueños o los recuerdos.
Bien escribió Cortázar, como pájaros posándose sin permiso...
Un abrazo, Diana
Pues quizà traerme a la Greco que tenía tiempo que no la escuchaba.
Además, sin ser masoquista, es una bonita frase.
Abrazos linda.
Qué bonito, quizás necesites esas palabras en su justo momento; vinieron a ti y las recibistes con placer.
Y con cariño.
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